Realizar una serie de trámites, tomar decisiones y todo lo que implica un servicio funerario, resulta tan agobiante que muchas veces pasamos inadvertidos detalles como la elección de ataúdes y féretros.

Al elegir un ataúd o féretro debemos tener en cuenta los materiales, la calidad, el diseño y el servicio pues hay un amplio abanico en el que elegir.

Los féretros más comunes son de madera y aglomerado, incluso los más modernos, de materiales biodegradables. Deben medir un mínimo de 15 mm de grosor y estar hechos de una sola pieza. Éstos van acolchados y forrados.

Para una mayor seguridad (especialmente en el caso de traslados largos) puede optarse por un féretro de dos cajas, en el que la caja exterior de madera es de un mínimo de 2 centímetros de grosor y su interior, de zinc, es de 0,30 mm.

Los ataúdes eran elaborados en forma de hexágono con la zona inferior en la que se colocan los pies más estrecha. Están hechos principalmente de madera de pino.

El sector funerario avanza como el resto y por ellos los féretros también pueden elegirse de distintos colores o materiales.

Es importante que en la agencia funeraria recibas asesoría por parte del personal, para elegir el más adecuado a tu presupuesto.